Después de expulsar a los invasores franceses necesitábamos un pequeño descanso, relajarnos y preparar bien las siguientes estrategias. Una vez más, mi enigmática compañera en la sombra se presta a ayudarme. Este año le estamos sacando mucho partido a la Mostra... especialmente a los pases. Hoy toca un uniforme muy especial: sables, cuchillos, chaleco y catalejo en mano nos dirigimos al cine, dispuestas a enfrentar el día sin miedo.
17:30 ¿Preparados? ¿Listas? ¡¡Pues AL ABORDAJE!!
¡De piratas! Por fin una película verdaderamente de aventuras en la sección Acción y Aventura ¡No dábamos crédito al verlo! A presentarla vinieron el director (para ser el capitán, un poco extraño), y el pirata principal (para opiniones pregúntenle a mi ayudanta cinematográfica, ya verán). Mientras éste último saludaba uno por uno a todos los asistentes al evento (nos cuidamos de guardar a buen recaudo bolsas, anillos y joyas, nunca te fíes de un bucanero), el capitán nos explicaba que la idea para el argumento le vino de una antigua leyenda que le contaba su padre sobre un pirata que, antes de ser ejecutado, afirmó que andaría sin cabeza; según el trato, el gobernante dejaría vivir a tantos de sus hombres como pasos diera. Efectivamente, después de ser decapitado dio doce pasos (de ahí el título, 12 pasos sin cabeza, pero en alemán, uséase 12 meter ohne kopf), salvando en teoría a doce compañeros, aunque al final todos fueron ejecutados. Esta película es la historia real, nos decía el capitán, de ése pirata y su tripulación. Vaya usted a saber si era cierto.
No empezó demasiado bien la cosa. Estaba bien enfocada, los asientos eran cómodos, la voz se oía bien, los subtítulos en inglés perfectos... pero los españoles no salían ¡Yupi! Problemas técnicos, claro. Es la Mostra. Así que tuvimos que esperar un rato. El pirata intentó entretenernos con conversaciones en inglés y fotografías, pero no logró que un venerable anciano no montara una buena escenita, quejándose de la proyección. Gracias a cómo ese viejo lobo de mar se ensañó con los pobres grumetillos acomodadores nos invitaron a cafés y hasta daban entradas gratis para otra sesión que eligiéramos.
Ya creímos que aquellos filibusteros nos habían engañado como a chinos cuando al fin anunciaron la proyección con sus correspondientes subtítulos en castellano debajo. Así fue como disfrutamos de esta estupenda película (diría superproducción alemana, pero probablemente me cuele, así que mejor callarse).
La historia gira, cómo no, entorno al pirata Klaus Störtebeker y su inseparable amigo y cocapitán, Gödeke Michels. El primero arrastra la leyenda y el segundo se encarga de los trapicheos. Juntos dirigen a un montón de rudos hombres (desde el contable retirado al jovencito que se enroló para convertirse en un hombre), viviendo en libertad y abordando buques de la Hansa, el gobierno de la región. Todo va bien hasta que Stötebeker es herido gravemente, pero sobrevive. A partir de ésa experiencia y de su encuentro con una joven del lugar donde atracan, comenzará a replantearse el oficio de pirata. Sin embargo, su compañero no está de acuerdo con cambiar de vida. Mientras las cosas se tensan entre los dos, un descubrimiento inaudito en el nuevo navío cambiará el rumbo (y nunca mejor dicho) de las cosas. Aunque la primera escena es la famosa ejecución del pirata, la sorpresa final sigue intacta.
No le falta ningún elemento para ser una gran peli de aventuras: divertida, con mucha acción, los imprescindibles tópicos (el pirata graciosete y el pringadillo no podían faltar) e incluso algo de rodaje. Así y todo tiene algunos puntos muy característicos, debido seguramente a la ambientación en la zona norte de Europa en vez de en el Caribe, que es donde estamos acostumbrados a ver señores con parche en el ojo. Los decorados son especialmente distintos: nada de mares transparentes y palmeras, mares oscuros, grandes acantilados, un frío que pela, ciudades de grandes catedrales góticas y casas de pico. El vestuario también cambia, aunque menos, y se aprecia sobre todo en los dirigentes. De hecho la recreación de ciudades, trajes con cofias, los barcos e incluso las actitudes que refleja (intrigas en la sombra, alguna traición...), me recuerda al videojuego The Guild II, que transcurre en las mismas ciudades durante la misma época. Aprovecho para recomendároslo, más aún después de ver 12 pasos sin cabeza. Recordadme que escriba sobre él algún día.
Otro punto fuera de lo común es el cambio de papeles. El pirata grande y fuertote, el legendario, es en realidad el tranquilo y sentimental, mientras que su compañero, el más delgaducho, relegado a funciones administrativas en teoría, es el bruto y violento de los dos.
Las coreografías están a la altura de cualquier buena obra del género. Con sus momentos cómicos, alguna pelea a dúo, y sobre todo, bien rodadas. La nueva moda hollywoodiense de rodar las peleas moviendo tanto la cámara que acabas mareado y sin enterarte de nada no es el método, afortunadamente, usado para esta película. De una forma más clásica, disfrutamos sin problemas de peleas a espada, abordajes al grito de "Fick die Hanseee" y alguna que otra pelea de bar. Algo en mi opinión imprescindible es la utilización de elementos del escenario en ellas: las mesas, el timón, los toneles del barco, los mástiles... cualquier cosa es buena para aderezar la pelea. Al más puro estilo Jackie Chan, con menos volteretas.
Por último (que menudo pedazo de análisis me está quedando), señalar la música como elemento también muy característico. Mezcla música moderna, rockera, en las escenas más intensas, con piezas típicas de la época. Lo curioso es que no se nota apenas el cambio, encajan completamente, cada estilo en su parte de la peli. De hecho, el rock durante el abordaje casi te parece necesario al final.
En resumen, muy recomendable no, imprescindible. Hemos salido encantadas. Da gusto ver que todavía se hacen películas de aventuras que sobre todo quieren entretener, divertir y emocionar. Por si todavía no os he convencido, he aquí el trailer de la susodicha peli. Si no sabéis alemán no os enteraréis de los diálogos, pero no hace falta ¡¡¡Fick die Hanse, queridos frikiduneros!!!
20:15 Después del buen sabor de boca, tengo un poco de miedo al entrar a la siguiente sesión (que no me voy a perder de milagro, por culpa de los problemas técnicos de la otra). Esta vez estoy sola, pero la peli anterior me ha recargado las pilas. Así que voy directa a ver...
De Alemania a España. Esta Mostra estamos haciendo una ronda por toda Europa. Lo bueno de ésta peli, aún antes de verla, era que no podía haber problemas técnicos con los subtítulos.
A destacar las estupendas actuaciones de Juan Diego (enorme, lo saben hasta los chinos), Luis Tosar (por supuestísimo), Estébaliz Gabilondo (difícil destacar entre tanto grande) y una secundaria Malena Alterio (como trabajadora despechada). También los paisajes son estupendos.
En fin, sin mucho que reseñar, pero también recomendable. Después, eso sí, de ver la de los piratas.
21:45 Vuelta a casa, una vez más, con el deber cumplido. Y con la absoluta certeza de que hoy ha sido, sin duda ninguna, el mejor día de la Mostra hasta ahora.
VALORACIÓN FINAL: 9 (casi redondo).
"¿Dónde están los organizadores de la Mostra? ¡¡QUE ME LOS TRAIGAAAN!!!"
Ya creímos que aquellos filibusteros nos habían engañado como a chinos cuando al fin anunciaron la proyección con sus correspondientes subtítulos en castellano debajo. Así fue como disfrutamos de esta estupenda película (diría superproducción alemana, pero probablemente me cuele, así que mejor callarse).
La historia gira, cómo no, entorno al pirata Klaus Störtebeker y su inseparable amigo y cocapitán, Gödeke Michels. El primero arrastra la leyenda y el segundo se encarga de los trapicheos. Juntos dirigen a un montón de rudos hombres (desde el contable retirado al jovencito que se enroló para convertirse en un hombre), viviendo en libertad y abordando buques de la Hansa, el gobierno de la región. Todo va bien hasta que Stötebeker es herido gravemente, pero sobrevive. A partir de ésa experiencia y de su encuentro con una joven del lugar donde atracan, comenzará a replantearse el oficio de pirata. Sin embargo, su compañero no está de acuerdo con cambiar de vida. Mientras las cosas se tensan entre los dos, un descubrimiento inaudito en el nuevo navío cambiará el rumbo (y nunca mejor dicho) de las cosas. Aunque la primera escena es la famosa ejecución del pirata, la sorpresa final sigue intacta.
No le falta ningún elemento para ser una gran peli de aventuras: divertida, con mucha acción, los imprescindibles tópicos (el pirata graciosete y el pringadillo no podían faltar) e incluso algo de rodaje. Así y todo tiene algunos puntos muy característicos, debido seguramente a la ambientación en la zona norte de Europa en vez de en el Caribe, que es donde estamos acostumbrados a ver señores con parche en el ojo. Los decorados son especialmente distintos: nada de mares transparentes y palmeras, mares oscuros, grandes acantilados, un frío que pela, ciudades de grandes catedrales góticas y casas de pico. El vestuario también cambia, aunque menos, y se aprecia sobre todo en los dirigentes. De hecho la recreación de ciudades, trajes con cofias, los barcos e incluso las actitudes que refleja (intrigas en la sombra, alguna traición...), me recuerda al videojuego The Guild II, que transcurre en las mismas ciudades durante la misma época. Aprovecho para recomendároslo, más aún después de ver 12 pasos sin cabeza. Recordadme que escriba sobre él algún día.
¡Qué bonitooo! Os juro que es igualico...
Otro punto fuera de lo común es el cambio de papeles. El pirata grande y fuertote, el legendario, es en realidad el tranquilo y sentimental, mientras que su compañero, el más delgaducho, relegado a funciones administrativas en teoría, es el bruto y violento de los dos.
Las coreografías están a la altura de cualquier buena obra del género. Con sus momentos cómicos, alguna pelea a dúo, y sobre todo, bien rodadas. La nueva moda hollywoodiense de rodar las peleas moviendo tanto la cámara que acabas mareado y sin enterarte de nada no es el método, afortunadamente, usado para esta película. De una forma más clásica, disfrutamos sin problemas de peleas a espada, abordajes al grito de "Fick die Hanseee" y alguna que otra pelea de bar. Algo en mi opinión imprescindible es la utilización de elementos del escenario en ellas: las mesas, el timón, los toneles del barco, los mástiles... cualquier cosa es buena para aderezar la pelea. Al más puro estilo Jackie Chan, con menos volteretas.
-¡AAAGS!!¿Pero esta ventana no daba al vestuario de las chicas?.
-Es que ésto es un barco pirata, mendrugo ¡Sólo tenemos hombretones!.
Por último (que menudo pedazo de análisis me está quedando), señalar la música como elemento también muy característico. Mezcla música moderna, rockera, en las escenas más intensas, con piezas típicas de la época. Lo curioso es que no se nota apenas el cambio, encajan completamente, cada estilo en su parte de la peli. De hecho, el rock durante el abordaje casi te parece necesario al final.
En resumen, muy recomendable no, imprescindible. Hemos salido encantadas. Da gusto ver que todavía se hacen películas de aventuras que sobre todo quieren entretener, divertir y emocionar. Por si todavía no os he convencido, he aquí el trailer de la susodicha peli. Si no sabéis alemán no os enteraréis de los diálogos, pero no hace falta ¡¡¡Fick die Hanse, queridos frikiduneros!!!
20:15 Después del buen sabor de boca, tengo un poco de miedo al entrar a la siguiente sesión (que no me voy a perder de milagro, por culpa de los problemas técnicos de la otra). Esta vez estoy sola, pero la peli anterior me ha recargado las pilas. Así que voy directa a ver...
De Alemania a España. Esta Mostra estamos haciendo una ronda por toda Europa. Lo bueno de ésta peli, aún antes de verla, era que no podía haber problemas técnicos con los subtítulos.
¡¡No puedorl molarme moooree!! ¡¡Pecadooor!!
En esta ocasión nos plantamos en un "casual day" de una empresa, el típico día de "vamos todos al campo a estrechar relaciones y relajarnos para que el trabajo vaya mejor", una moda de ésas norteamericana. Las dos historias principales giran entorno a un chico y una chica jóvenes, enchufados por el jefe (uno por novio de la hija, otra por mejor amiga) directos a puestos altos. Aunque todo parece perfecto, el tener que dar la razón siempre a los cargos altos ocasiona muchos conflictos, con ellos y con el resto de los compañeros. Cruzadas con éstas, los relatos de los demás trabajadores, llenos de problemas personales y desilusiones profesionales, y de los mismísimos directores, que tienen muy claro su poder. Una tragicomedia de tema bastante usado (los jefes que siempre son jefes y los currantes aguantando), pero sin dejar de tener cierto encanto, precisamente porque se presenta con el fondo de ese "casual day", que ridiculiza un poco más todo el tejemaneje de la empresa. Todo con un reparto de excepción, hasta los secundarísimos son conocidísimos.
El aeróbic con música en vivo, indispensable en un spanish casual day.
A destacar las estupendas actuaciones de Juan Diego (enorme, lo saben hasta los chinos), Luis Tosar (por supuestísimo), Estébaliz Gabilondo (difícil destacar entre tanto grande) y una secundaria Malena Alterio (como trabajadora despechada). También los paisajes son estupendos.
En fin, sin mucho que reseñar, pero también recomendable. Después, eso sí, de ver la de los piratas.
21:45 Vuelta a casa, una vez más, con el deber cumplido. Y con la absoluta certeza de que hoy ha sido, sin duda ninguna, el mejor día de la Mostra hasta ahora.
VALORACIÓN FINAL: 9 (casi redondo).
1 comentario:
AAAAyyyyy!!!!!!!! OMÁ Q RICO MI CARA-PAN!
q volumen! q tamaño! q sorisita picarona! el increible hombre mas ancho q alto!...
estooo...voy a limpiar el teclado de babas...
Publicar un comentario